No es más que un computador portátil que yace muerto sobre la cama.
Sus venas negras, amarillas, rojas y verdes dejaron de circular la sangre eléctrica.
¿Importa? Desde luego. Todo muere en la vida así como nació de otra muerte, así como morirá y volverá a nacer. Piensa, medita. No es sólo un computador portátil. Es también lo que tuvo dentro, lo que vivió entres sus cavidades circuíticas: letras, imágenes. Toda una vida que no sirvió para nada.
Es así también la vida humana, que cuando muere no deja más que un recuerdo que también morirá con el tiempo, porque esa vida humana, la humanidad, un día dejará de ser y cada recuerdo se separará en átomos y cada átomo por sí solo no valdrá nada.
Un átomo aquí y otro a millones de años luz que juntos podrían conformar la millonésima parte de algo que no volverá a ser.
No es más que un computador portátil que yace muerto sobre la cama: Eres tú, la Tierra y su historia.
-Micky R. Bane.
15/04/2016